"Jedis" criollos aprenden lado bueno de la fuerza con "Yoda" ruso

Quién cuando niño no ha soñado con tener la visión de rayo láser de Superman para sapear detrás de las murallas o "la fuerza" de los Jedi de la "Guerra de las Galaxias" para leer un libro con sólo tocarlo.

Todas estas maravillas hasta ahora se veían sólo en las películas, pero ahora en Chile ya hay quienes entrenan el arte del power mental.

En la sede de Portal Globalink en Las Condes, imparten el Programa de Cerebro Scanner, donde el profesor rusoski Arthur Estoletov, como el maestro Yoda, entrena a pitufos y grandotes para que conozcan sus capacidades mentales, o como aseguran en un aviso publicitario, entregar "un mejoramiento e incremento de las capacidades cerebrales y su transformación en supercapacidades".

El curso ya cuenta con más de 40 brocas, de entre 8 y 15 años. Los primerizos, del nivel uno, tienen la rarífica cualidad de saber el color de las cosas sin mirar o leer una carta cerrada.

La sesión a la que tuvo acceso La Cuarta, la senséi, comenzó con el vendaje de los ojos de los alumnos. La primera "magia" fue jugar al mono mayor bajo las instrucciones de Estoletov.

Luego lanza por toda la habitación pelotitas de colores. Estoletov en español chancado les indica a cada alumno que recojan las esféricas de cierto color. Le achuntaron a todas.

La cosa se puso más rara que perro con dos colas cuando el ruso pidió a nuestro apóstol de las fotos que escribiera piola unos números y luego que doblara la hoja. El papelito cayó en manos de la aprendiz más pitufa, quien sin titubear dijo: "528". Quedamos con la sanguchera abierta.
Otra mentalista peloláis nos leyó el carné de identidad sin destaparse una pestaña.

De más está decir que no se parecen en nada a estos aprendices de jedi.



Estos "padawans", se ven así.




¿TRUCO?
Estoletov jura que lo que enseña no es un truco barato y que todo está en la mente.

Relata que aprendió todo lo que sabe en el Tíbet, donde los monjes le enseñaron a concentrarse y poder "ver más allá".

Explica que con Cerebro Scanner se pretende formar una generación de "niños Jedi", pero de veritas, que estudien sin leer libros, sepan resolver problemas desde su origen y de paso desarrollen una memoria de elefante.

TALENTOS
Bernardita Artal (8) desde diciembre va a clases y ya puede leer algo sin mirar.

"La paso súper bien, me entretiene", cuenta mientras lee de corrido, pero toda vendada. Su hermana mayor, Macarena (12), cuenta que ya intenta ver a través de las murallas. Sin embargo, lo que más llama su atención es la capacidad de otras personas en el mundo de ver los órganos de las personas y a eso aspira.

Otro aventajado es Matías, quien se maneja perfecto con la mente.

Los adultos también pueden ingresar al curso, "pero hay una serie de requerimientos", advierte Estoletov.

Primero, está prohibido empinar el codo. Pura agüita y mucho deporte. Exige además que no se abuse del cacheteo, para que la energía no se escape y fluya en el conocimiento de los desconocidos derroteros de la mente.

Para ser superhéroe hay que sacrificarse.

Fuente: http://www.lacuarta.cl/contenido/63_1613_9.shtml




Reo fanático de "La Guerra de las Galaxias" se puso Obi Wan Kenobi

Un peligroso criminal, fanático de la saga "La Guerra de las galaxias", decidió pasar el rato en la cana enseñando los valores del Jedi y para llevar a cabo tan honrosa labor, decidió cambiar su nombre a Obi Wan Kenobi.

En 2001, Daniel House, cayó preso por asesinar a una mujer en la ciudad británica de York. Con el tiempo de encierro encontró su misión en el mundo y se hizo llamar como el maestro de Luke Skywalker.

Cuando los otros presos se dieron cuenta que la cosa no pintaba bien, le quisieron sacar las ganas, pero el hombrón se defendió a punta de escobillonazos, que el señor "Kenobi" hace llamar "espada láser".

"Después de los ataques los otros presos le tomaron respeto. Ahora todos lo llaman como el personaje", asegura un gendarme.

Ahora está escribiendo el libro "Memorias de Obi Wan", el que espera publicarlo al salir.
Los guardias lo consideran ultra peligroso.

Fuente: http://www.lacuarta.cl/contenido/66_1609_9.shtml